- Los cursos de agua del Riachuelo mantienen altos niveles de contaminación, 12 años después del inicio del plan de saneamiento. De acuerdo al análisis realizado por la Autoridad Cuenca Matanza-Riachuelo (AcuMaR), la calidad de los cursos de agua del río principal y afluentes era Mala o Muy mala en 2015 y 2016.
- Estos resultados demuestran el fracaso de las políticas para reducir los niveles de contaminación y la falta de certezas para el futuro del saneamiento de la Cuenca.
- En una nueva audiencia pública en la Corte Suprema de Justicia de la Nación, las autoridades nacionales no pudieron ni siquiera establecer plazos para alcanzar el saneamiento. El Presidente de la Corte destacó que la inestabilidad de los cargos directivos atenta contra la operatividad, calidad institucional y el logro de los objetivos.
Por @Lo_Pujo
En el año 2006 fue creada por Ley N° 26168, la Autoridad de Cuenca Matanza-Riachuelo -ACuMaR- como ente autónomo, autárquico e interjurisdiccional para ejecutar un plan de saneamiento, en respuesta a la causa judicial iniciada por en 2004 por un grupo de vecinos y que culminó en el fallo de la Corte de Suprema de Justicia de la Nación -CSJN- de 2008.
Doce años más tarde, no se evidencia una mejora de la calidad de los cursos de agua superficiales ni menores niveles de contaminación. De acuerdo a los análisis realizados por el propio organismo, la calidad de las aguas estaba en categoría Mala o Muy mala en todo el curso del río en los años 2015 y 2016, según puede observarse en el mapa. [1] Estos resultados son coincidentes con informes previos realizados por ONG que analizaron la calidad desde el año 2008, cuando se iniciaron los monitoreos. [2]
Resultados de los monitoreos en los cursos de agua superficiales CMR.
Mapa. Indice de calidad de agua superficial (ICA-Sup) de la CHMR. Fuente: Coordinación de Calidad Ambiental de la ACUMAR. Actualizado a octubre de 2017.
Según informan, se realizó una evaluación multidimensional del estado de la calidad de las aguas superficiales en la Cuenca Hídrica Matanza Riachuelo, y su evolución en el tiempo, denominado Indice de Calidad de Agua Superficial (ICA-Sup). Este índice, elaborado para la Cuenca, sintetiza los datos aportados por 12 parámetros físico-químicos y biológicos (Porcentaje de saturación de Oxígeno Disuelto, Demanda biológica de oxígeno, Demanda química de oxígeno, Fósforo total, Nitrógeno amoniacal, Sólidos suspendidos totales, Conductividad eléctrica, Escherichia coli, pH, Cromo total, Plomo total e Hidrocarburos totales) en 38 estaciones de monitoreo durante cuatro campañas en 2015 y 2016 (dos de verano y dos de invierno).
Así, obtienen un índice graduado en cinco categorías entre 0 y 100, cuya última categoría implica “protección de biota”. Cabe destacar que este índice da cuenta de contaminación de tipo industrial, no sólo contaminación orgánica atribuible a, por ejemplo, a descargas cloacales. Los vertidos de origen industrial aportan la mayor cantidad de sustancias perjudiciales para la salud y el ambiente como los metales pesados.
Fecha campaña monitoreo | Estaciones monitoreo | Categoría |
Abril 2015 | 30 | 0-25 |
7 | 26-50 | |
1 | 51-75 | |
Diciembre 2015 | 29 | 0-25 |
6 | 26-50 | |
3 | S/D | |
Abril 2016 | 23 | 0-25 |
13 | 26-50 | |
2 | S/D | |
Noviembre 2016 | 25 | 0-25 |
11 | 26-50 | |
2 | S/D |
Rango índice (Q) | Clasificación |
96-100 | Muy buena |
76-95 | Buena |
51-75 | Media |
26-50 | Mala |
0-25 | Muy mala |
Fuente: Indicadores – AcuMaR-
Aunque aclaran que los valores promedio del ICA-Sup se incrementan de 18,7 en 2015 a 22,2 en 2016, estos resultados demuestran que la calidad del agua es en promedio, muy mala, es decir, persisten los niveles de contaminación altos a lo largo de toda la cuenca hídrica. De hecho, sólo una estación en 2015 alcanzó una calidad en el de rango 51-75, es decir, Media, pero luego no se sostiene en el tiempo.
Si bien se deberían haber incluido datos desde el año 2008, estos resultados dejan en evidencia el fracaso de las políticas y herramientas utilizadas para reducir los niveles de contaminación, especialmente aquellas referidas a la contaminación industrial. Luego de años de críticas de diversos organismos, ONG y especialistas, recién en 2017 se reformaron las normas referidas a las Declaraciones de Agente Contaminante, la Tabla Consolidada de Límites Admisibles para Descargas de Efluentes Líquidos y de Usos y Objetivos de Calidad de Agua, que impedían esperar una mejora en los niveles de contaminación, y se integraron en la Resolución N° 46/2017. A pesar de las críticas de las ONG porque esta reforma habilita el vertido de sustancias prohibidas previamente o por otras normas, [3] en los hechos, no se informa cómo se está ejecutando en la gestión.
Por otro lado, se genera información técnica que no queda claro como impacta en la gestión para reducir los niveles de contaminación o cómo se articulan las diferentes herramientas, por ejemplo, las acciones de los Programa Reconversión Industrial (PRI) con los resultados de los monitoreos para establecer posibles correlaciones. Tampoco hay información pública que permita conocer el estado de otras herramientas, por ejemplo, el análisis de las 14 Sub-cuencas contemplando la medición de caudales y carga másica y su impacto en la gestión.
A pesar de la relevancia del tema, que debería ser uno de los ejes principales para guiar la ejecución de diferentes políticas, ni siquiera logró abordarse en la audiencia realizada el pasado miércoles 14 de marzo en la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Las autoridades de ACuMaR no lograron contestar consultas básicas como la estimación de plazos razonables para cumplir la sentencia. De hecho, el presidente de la Corte, Ricardo Lorenzetti destacó que ninguna manda fue cumplida y que los nuevos funcionarios siempre están “recalculando”. También, destacó un informe de la Auditoría General de la Nación que denuncia que la inestabilidad de los cargos directivos derivada principalmente por cambios políticos, atenta contra la operatividad, calidad institucional y el logro de los objetivos.
A poco de cumplirse diez años del Fallo de la Corte, ACuMaR sigue demostrando que, y a pesar de estar integrada por tres gobiernos del mismo signo político, no logra ejecutar un plan que permita esperar la recomposición de la Cuenca.
[1] http://www.acumar.gob.ar/indicadores/indice-de-calidad-de-agua-superficial-ica-sup/
[2] http://www.greenpeace.org/argentina/es/informes/Las-Aguas-siguen-bajando-turbias/
http://www.greenpeace.org/argentina/es/informes/Las-aguas-siguen-bajando-turbias–2014/
[3] https://www.lanacion.com.ar/2040863-riachuelo-fuertes-criticas-al-organismo-encargado-de-sanearlo