CIRCULAR POR DISEÑO: TENDENCIAS EN LA FABRICACIÓN DE PRODUCTOS PARA LA ECONOMÍA CIRCULAR EN EUROPA

  • Un nuevo informe de Agencia Europea de Medio Ambiente analiza los sistemas de diseño y producción de bienes en el marco de la transición hacia una economía circular, nuevo eje de gestión de políticas públicas definida por la Unión Europea en diciembre de 2015.
  • Entre otros temas, aborda las tendencias actuales e identifica cuáles están más orientadas a aportar desde el punto de vista de la economía circular, por ejemplo, el consumo colaborativo. Otras, como la creciente complejidad del diseño y funcionalidad de los productos marcarían una tendencia negativa.
  • Consideran que es necesario brindar mayor atención a la reutilización, reparación, redistribución, remanufactura y renovación de productos en el marco de la economía circular, ya que han sido menos abordadas que la gestión de residuos y el reciclaje.

Por Lorena Pujo @Lo_Pujo

El estudio Circular por diseño: productos en la economía circular,[1] publicado recientemente, es el segundo de una serie de informes de la Agencia Europea de Medio Ambiente sobre la economía circular que busca aclarar ese concepto, dar perspectiva de los impactos ambientales, sociales y económicos y destacar las brechas de conocimiento y los aspectos políticos que necesitan atenderse.

El informe aborda en este sentido diversas cuestiones relacionadas a los modos de fabricación de productos en el marco del paquete de economía circular aprobado por la Unión Europea en diciembre de 2015. Este tema ha cobrado gran relevancia en la agenda comunitaria, que se suma al pedido del Parlamento a avanzar contra la obsolescencia programada.[2] Destaca principalmente la importancia de los temas relacionados con los productos, como el eco-diseño, los incentivos a la innovación, los modelos y tendencias de producción-consumo, más allá de la eficiencia de los recursos y reciclaje de residuos.

Entre otros temas analizados, dedican una parte del estudio a la identificación de tendencias actuales en materia de diseño y producción de bienes, estableciendo si esas tendencias se adecuan o no a los principios de la economía circular, más allá de que la economía lineal está profundamente arraigada. Algunas son consideradas positivas dentro del sistema actual, mientras que otras son innovaciones recientes, aún en nichos. Otras, en tanto, parecen alejarse del modelo circular. Se trata de un análisis preliminar en base a opiniones expertas que, afirman, requiere de más investigaciones y análisis en el futuro, por lo cual los balances de las tendencias son en términos generales. Se han identificado las siguientes:

 

Tendencia 1 – Creciente complejidad de diseño y funcionalidad de los productos

Aspectos positivos: puede conducir a una menor demanda materiales debido a multifuncionalidad

Aspectos negativos: reduce el potencial de reutilización y reciclaje (materiales heterogéneos, desmontaje complejo)

Balance: probablemente negativo

 

Tendencia 2 – Aumento de la utilización del diseño modular

Aspectos positivos: puede prolongar la vida útil del producto; fácil remanufactura y reparación

Aspectos negativos: –

Balance: probablemente positivo

Tendencia 3 – Producción local en demanda por fabricación aditiva [3]

Aspectos positivos: permite una mayor eficiencia de los materiales en comparación con la producción substractiva

Aspectos negativos: la personalización de productos puede dificultar el uso compartido; puede obstaculizar la reciclabilidad (productos multimateriales)

Balance: poco claro

Tendencia 4 – Creación de servicios alrededor de productos

Aspectos positivos: puede aumentar la eficiencia del producto y el uso de los materiales (frecuencia de uso, vida útil, reparación)

Aspectos negativos: –

Balance: probablemente positivo

 

Tendencia 5 – Sistemas de entrega en el hogar

Aspectos positivos: la logística inversa permite la reutilización, reparación y remanufactura de productos

Aspectos negativos: puede conducir a un aumento en la generación de residuos (materiales de embalaje)

Balance: poco claro

Tendencia 6 – Cambios en la vida útil del producto

Aspectos positivos: aumento de la vida útil técnica de algunos productos

Aspectos negativos: disminución de la vida útil de otros productos

Balance: poco claro

Tendencia 7 – Consumo colaborativo

Aspectos positivos: permite un uso más frecuente y eficiente de productos individuales

Aspectos negativos: –

Balance: probablemente positivo

Tendencia 8 – Mercados para el reciclado

Aspectos positivos: brinda apoyo a modelos de negocios de reciclado

Aspectos negativos: reduce los incentivos para el re-uso

Balance: poco claro

Tendencia 9 – Internet de las cosas

Aspectos positivos: permite acceder a una mejor información sobre la composición del producto y mejora el reciclaje de materiales

Aspectos negativos: conduce posiblemente a productos más complejo

Balance: poco claro

De ese listado, identifican dos tendencias que tienen mayores impactos positivos en cuanto a la economía circular:

En la Tendencia 4 reconocen diferentes grados de evolución en pasar de brindar “producto-a-servicio”, por ejemplo, el  mantenimiento post-venta de un bien. Este tipo de actividad que es común entre empresas (B2B), por ejemplo, el mantenimiento de equipos de maquinaria pesada, es identificado como menos frecuente entre empresa fabricantes y consumidores. Entre los ejemplos que identifican como impulsores de esta nueva tendencia mencionan a los fabricantes de iluminación LED, que han comenzado a brindar servicios para afrontar el menor volumen de ventas por la mayor vida útil de este tipo de bombitas. O en el sector de muebles de oficina, que ofrecen más flexibilidad para fabricar muebles personalizados al contexto específico y deseos de cada cliente, como estaciones de trabajo flexibles.

Destacan así que el modelo de negocios basado en servicios es una forma relevante de dar creciente circularidad a los productos si la propiedad sigue siendo del productor. En ese caso, minimizar el costo total del ciclo de vida del producto es un incentivo que puede fomentar el diseño de productos de mayor vida útil, reutilización, reparación o remanufactura. Además, los productos tendrían mayor tasa de utilización que si fuesen de propiedad individual, por lo que es necesario fabricar menos productos. Destacan igualmente, para tener en cuenta como puntos negativos, que el mayor uso puede disminuir la vida útil de un producto o que pueden aumentar los costos si la mano de obra de reparación es muy cara.

En el caso de la Tendencia 7, el consumo colaborativo o uso compartido de los productos por parte de consumidores, ya sea individualmente o mediada por una empresa, es identificada como todavía un nicho, aunque se está convirtiendo cada vez más en aspecto importante del comportamiento de los consumidores. Este hecho se refleja en los datos de respaldo que incluyen. Una encuesta realizada por asociaciones de consumidores en cuatro Estados miembros de la UE (Bélgica, Italia, Portugal y España) reveló que la participación en este tipo de actividades es bastante alta, llegando al 72% de los entrevistados. El  Reino Unido sería la «capital» de la economía colaborativa; hoy cuenta con una de cada diez empresas en este nuevo sector con predominio digital, más que los tres países que siguen en la lista de Europa combinados (Francia, Alemania y España).

Diversas investigaciones han identificado incentivos económicos como ganar más plata a través del consumo colaborativo que en el mercado tradicional, una conciencia real sobre el costo de un producto y el ahorro de tiempo, el espacio y esfuerzo. Otras razones más ambientales son una reciente conciencia ambiental y visión crítica al sobre-consumo mientras otras son la confianza, la reputación, el deseo de pertenecer a una comunidad y la autenticidad.

Si bien hay gran diversidad, identifican dos modelos: modelo corporativo (por ejemplo, Uber y Airbnb) y  el modelo comunitario (por ejemplo, jardinería urbana, compartir juguetes, herramientas o ropa, etc.). Un estudio de mercado sobre el uso compartido de automóviles en Europa, por ejemplo, predice que las ventas de automóviles serán 182.000 unidades más bajas (o 1,3% de las ventas totales previstas) por compartir automóviles. Sin embargo, aclaran que es necesaria mayor investigación para tener mejores precisiones sobre impactos reales en casos específicos, por ejemplo, si no sería mejor evaluar cuanta gente abandona el trasporte individual en automóvil por el transporte público, o si el couchsurfing [4] promueve que más gente viaje a destinos más lejanos, resultado en mayores emisiones de gases de efecto invernadero, entre otros.

En síntesis, el informe destaca que la transición hacia una economía circular requiere cambios fundamentales en los sistemas de producción y el consumo. Hasta ahora la reutilización, reparación, redistribución, remanufactura y renovación recibieron menos atención en las políticas públicas que las cuestiones relacionadas con los residuos y reciclaje, hecho que debe redefinirse en el futuro para alcanzar la economía circular.

 

[1] https://www.eea.europa.eu/publications/circular-by-design

[2] http://www.europarl.europa.eu/news/es/press-room/20170629IPR78633/making-consumer-products-more-durable-and-easier-to-repair

[3] Se denomina fabricación aditiva al proceso de unir materiales para crear objetos a partir de datos de modelos 3D, generalmente de capa a capa, en oposición a las metodologías de fabricación sustractiva, que comprende, por ejemplo, procesos como el fresado, el torneado y el esmerilado.

[4] Cuando las personas viajan de un destino a otro, alojándose en viviendas particulares en general de forma gratuita.

 

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s