- La UTN Regional Buenos Aires patentó un equipo de energía undimotriz, único en su tipo, que capta la energía de las olas mediante un sistema de boyas.
- Una empresa de Mar del Plata proyecta desarrollar un parque marino para abastecer de electricidad a empresas y municipios de la zona
- Con sus 5000 kilómetros de costa, Argentina cuenta con un potencial enorme en el desarrollo de esta clase energía.
Por Gustavo Stancanelli @GusStancanelli
Sin lugar a dudas el mar es uno de los ecosistemas que más recursos nos brindan como especie humana. Forjó la vida en el planeta hace cientos de millones de años y además de alimentarnos, nos dio la posibilidad de explorar e ir poblando muy de a poco buena parte de la superficie de la Tierra. En los últimos 100 años le pagamos con ingratitud y no paramos de saquearlo y contaminarlo, al punto que los plásticos y toda clase de residuos que le arrojamos forman islas gigantescas sobre las aguas, verdaderos países formados por basura que navegan a la deriva por los océanos causando daños ambientales irreversibles.
Pero a pesar que estresamos el ecosistema marino hasta casi la extenuación, el mar todavía tiene algo para darnos sin correr el riesgo que se agote: su propia energía. De eso se trata el desarrollo que patentó la Universidad Tecnológica Nacional, Regional Buenos Aires (UTN BA), para fabricar un equipo de energía undimotriz que capta mediante un sistema de boyas la energía que generan las olas del mar. Se trata de aprovechar un recurso renovable y que se encuentra a lo largo de los 5000 kilómetros de costa marítima que tiene Argentina. Su base, y su virtud, son las ondas marinas, que tienen la capacidad de viajar cientos de millas de manera constante y casi sin perder energía.
Lo que hace único en su tipo a este equipo de generación de energía undimotriz que ideó la UTN, es que su sistema de boyas es mecánico, a diferencia del resto que son sistemas hidráulicos. Los equipos hidráulicos tienen más problemas e ineficiencias: conllevan un proceso más de transformación de energía con lo que tienen más pérdidas, necesitan más mantenimiento y tienen mayores posibilidades de falla y más peligros de fuga y contaminación, porque utilizan fluidos derivados del petróleo.
Del proyecto de investigación del grupo de energía undimotriz de la UTN BA, que arrancó en 2012, a la firma reciente del convenio con la empresa QM de Mar del Plata, para instalar el primer parque que convierta las ondas marinas en energía eléctrica. Según informó la empresa en una nota publicada recientemente en el diario El Cronista, invertirán 4 millones de pesos en un parque de 200 boyas que generarán 6MW de potencia, capaces de proveer de electricidad a unos 5000 hogares o 20 mil personas.
“La energía undimotriz se puede instalar en cualquier zona costera con olas de más de 50 centímetros Las ventajas es que el combustible es gratis, interminable y de elevado potencial energético, son olas”, afirma el ingeniero Alejandro Haim, una de las cabezas del equipo de undimotriz de la UTN BA. Por su parte, Mario Pelissero, director de la cátedra de Química Aplicada de la carrera de Ingeniería Mecánica, de la misma casa de estudios asegura que: “El potencial que tiene Argentina con respecto a la energía undimotriz es muy grande. De todo nuestro litoral marítimo, en principio los más de 200 kilómetros que van entre Quequen y Villa Gesell son un terreno fértil para generar este tipo de proyectos”, concluyó.